Los posesivos
| Un poseedor | Varios poseedores |
1ª Persona | meus, -a, -um | noster, nostra, nostrum |
2ª Persona | tuus, -a, -um | uester, uestra, uestrum |
3ª Persona (reflexivo) | suus, -a, -um |
Su función principal es la morfemática: expresan la categoría de persona y número. El posesivo reflexivo suus tiene además función fórica, pues el poseedor es siempre el sujeto de la oración; si el poseedor no es el sujeto de la oración, se utiliza como posesivo el genitivo del pronombre fórico is, ea, id, o el genitivo de los demostrativos. Véase el siguiente ejemplo:
El padre ama a sus hijos, pero castiga sus vicios,
Pater fīliōs suōs amat, sed eōrum vitia reprehendit.
Tienen también una importante función enfática, si tenemos en cuenta que el latín economiza el empleo de los posesivos y no los emplea cuando está claro quién es el poseedor. Su aparición en estos casos es de claro valor pleonástico. Su valor enfático, como en el caso de los pronombres personales, puede aparecer marcado por la adición de ciertas partículas -como -met, pte- al pronombre:
Meīs oculīs vīdī, 'lo vi con mis propios ojos'.
Tūte tibi tuopte ingeniō prōdēs plūrimum, 'tú mismo te eres de grandísimo provecho por tu propio talento'.
Se forman sobre los mismos temas de los pronombres personales correspondientes y se declinan como adjetivos de la primera clase, con la única diferencia de que el vocativo de meus es mī.
Usados como pronombres (sin concertar con ningún sustantivo), los posesivos habrán de ser traducidos sustantivados mediante el correspondiente artículo:
Nostrī cum hostibus proelium commisērunt, 'los nuestros trabaron combate con los enemigos'.
Corpora suōrum in campō reliquērunt, 'abandonaron en el campo de batalla los cuerpos de los suyos'.
Corpora suōrum in campō reliquērunt, 'abandonaron en el campo de batalla los cuerpos de los suyos'.